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Edelmira Boller en Salón Comunal, Bogotá, Colombia.

Desde el mes de febrero quedó inaugurada la muestra “Edelmira Boller en Contexto” en la galería Salón Comunal, de Bogotá, Colombia.




La muestra podrá ser visitada durante la “Semana de galerías latinoamericanas” organizada por Feria Equinox entre el 17 y 24 de marzo y está compuesta por más de 30 obras entre esculturas, pinturas y dibujos, desde la primera escultura que hizo para la exposición en la Galería Belarca en 1979 hasta obras más recientes. Además, todas las piezas se articulan con documentos, fotografías, libros, artículos de prensa de su archivo personal, revistas, en particular Arte en Colombia Internacional y conexiones con el Banco de Archivos Digitales de Artes en Colombia-UNIANDES. En conjunto, obras y documentos, configuran una escena que permite relacionar a la Maestra con la historia del arte en Colombia de finales del siglo XX y principios del XXI.


En el catálogo de la muestra podemos leer algunas palabras y recuerdos de quien fuera su maestro, David Manzur, con quien se formó entre los años de 1975 y 1979. El maestro nos cuenta que el trabajo de Edelmira le recuerda la época en que él mismo trabajó como ayudante de Naum Gabo, en su época constructivista y con quien conoció el rigor de la geometría y la ingeniería. Edelmira trabajó en sintonía con estos principios buscando efectos ópticos y con el tiempo avanzar al ensamble de elementos geométricos con formas casuales, nos cuenta el maestro.


La historia de Edelmira está llena de sorpresas. Nos dice en una nota periodística que se convirtió en artista cuando era una “vieja”, tenía 37 años; y que nunca estudió artes en la universidad, simplemente se graduó de bachiller y decidió ser independiente. También se casó “vieja” para los estándares de la época, tenía 27 años. Ya en busca de su camino artístico se encontró con David Manzur, con quien comenzó estudiando pintura, para descubrir unos años después que su vocación e interés estaba ligado a lo escultórico y, desde allí, comenzó una carrera no siempre reconocida que se extiende hasta nuestros días.



Durante el año 1996, escribe Carlos Silva en el catálogo de la exposición “La bella utilidad” de Edelmira: “(…) No hay mayor falacia que la de sostener que el arte es inútil. Nunca lo fue en ninguna cultura del planeta. Y bien lo sabe, asume y expresa Edelmira Boller (…) Sus esculturas se sostienen con todo el rigor y la austera elocuencia de quien posee talento para el arte y talante para manipular con maestría una materia de tan noble y difícil alcurnia: el hierro (…) En todo caso, y sin dar más cauce a la historia y a la teoría, estamos ante un conjunto espléndido de obras cuyo mayor corolario son las palabras de la propia Edelmira Boller: Empecé transformando mi propios muebles, quitando pedacitos. Remplacé la pata de una mesa, por una de hierro ¡Resultó! Descubrí que las cosas podían ser como yo las veía y que transformar era posible. Y además, ¿Quién o qué me lo impide?”


En 2017, la Universidad Jorge Tadeo Lozano presentó una muestra retrospectiva con esculturas de todas sus etapas. En una entrevista a María Elvira Escallón, curadora de la muestra, expresó: “(Boller) debería estar con Ramírez Villamizar, con Negret, con Feliza Bursztyn en términos de reconocimiento, pero ella es una persona alejada del mundo, no le gusta figurar. Estamos rescatando a un persona que está olvidada”. Siguiendo esta necesidad de reconocimiento para una artista tan prolífera como Edelmira, Salón Comunal presenta esta nueva muestra de la artista acompañada de un archivo profundo y detallado de su trabajo y trayectoria, para rescatar su figura y colocarla en el lugar que le corresponde en las artes colombianas. Hoy Edelmira tiene 84 años, pero todavía para aquellos quienes admiran su obra les resulta difícil comprender cómo no ha obtenido el reconocimiento del mundo del arte colombiano. Su obra es contundente y brutal, compuesta de tornillos, láminas de hierro, restos de maquinaria industrial, en fin, chatarra que al caer en sus manos se transfigura en otra cosa, se ordena, para ver algo más allá del desecho.


El maestro Manzur piensa que el trabajo de Edelmira está al nivel de los mejores artistas colombianos, pero siempre estuvo apartada de un medio competitivo -y no siempre ético- como lo es el campo de las artes visuales. Más que una falta de reconocimiento, el desconocimiento de la artista y su obra es una falta de justicia. En su persona, se repite una historia conocida en América latina: dejar por fuera del canon y del linde de la historia a aquellas artistas que no se amoldaron a un determinado criterio estético o que no se interesaron en la competencia implícita del campo de las artes.




Sobre Salón Comunal

Salón Comunal fue concebido en 2013 en Bogotá por artistas colombianos que imaginaron una galería que pudiera existir en una casa familiar de un barrio tradicional.

Desde su inicio, la galería busca contribuir a la circulación, exhibición, producción, formación y comercialización de arte contemporáneo.



¿Dónde?

En Salón Comunal durante todo marzo y hasta el 8 de abril.

Transversal 27a # 53b-25

057 3053477418


Fuentes:

*Catálogo "Edelmira Boler en contexto", cortesía Galería Salón Comunal.

*Catálogo de la exposición La bella utilidad de Edelmira Boller por Carlos Silva. Caracas Venezuela, 1996

*"Edelmira Boller: el gran misterio del arte colombiano" por Fernando Gómez Echeverri, Diario El Tiempo


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